Los perros, al igual que los humanos, necesitan cuidados médicos regulares para mantener una buena salud a lo largo de sus vidas. Una visita anual al veterinario es esencial para detectar y prevenir enfermedades, actualizar vacunas y asegurar el bienestar general del animal.
Tener un implica también una responsabilidad. Necesitan controles veterinarios anuales, más allá de las visitas de rigor en caso de que sufran algún problema de salud.
Examen físico completo
El veterinario realizará un examen físico completo que incluye: Evaluación del Peso y la Condición Corporal: Es fundamental revisar el peso del perro y su índice de condición corporal (ICC) para identificar
sobrepeso, obesidad o bajo peso. Inspección de la Piel y el Pelaje: Se busca cualquier signo de irritación,
infecciones, parásitos externos (como pulgas y garrapatas) o problemas dermatológicos.
Revisión de los Oídos y los Ojos: Los oídos se revisan para detectar infecciones, ácaros y acumulación de cera, mientras que los ojos se examinan para encontrar signos de infecciones, cataratas o conjuntivitis.
Chequeo Dental: La salud bucal es crucial; el veterinario buscará señales
de enfermedades periodontales, placas, caries y sarro.
Evaluación Cardiovascular: El corazón y los pulmones se auscultan para identificar soplos cardíacos y problemas respiratorios.
Palpación Abdominal y Examen Musculoesquelético: Se tocará el
abdomen para detectar anomalías y se evaluará la movilidad y fuerza de los
músculos y articulaciones.
Vacunas
Las vacunaciones son una parte vital del cuidado preventivo. Las vacunas
comúnmente actualizadas incluyen:
Rabia: vital para prevenir esta enfermedad mortal.
Moquillo, parvovirus y hepatitis: incluidas en la vacuna múltiple (DHPP).
Influenza canina: especialmente relevante en zonas con brotes frecuentes.
Pruebas de laboratorio
Análisis de sangre: incluyen un hemograma completo y un panel bioquímico para evaluar la función de órganos como el hígado y los riñones.
Pruebas de parásitos intestinales: un análisis de heces detectará la presencia de parásitos internos como lombrices, giardias y coccidios.
Prueba de filariasis cardíaca: especialmente crucial en áreas donde los mosquitos son comunes, ya que transmiten esta enfermedad
potencialmente mortal.
Prevención de Parásitos Externos: Tratamientos preventivos para pulgas,
garrapatas y ácaros son esenciales.
Desparasitación Interna: Se administran antiparasitarios regularmente para prevenir y tratar infestaciones por gusanos intestinales, tenias y filarias.
Evaluación nutricional y de estilo de vida
El veterinario también discutirá la dieta del perro y su nivel de actividad física para asegurarse de que está recibiendo los nutrientes necesarios y el ejercicio adecuado. Se pueden hacer ajustes nutricionales basados en la edad, peso y estado de salud general del perro.
Un perro juega mientras recibe entrenamiento.
Evaluación de comportamiento
Cualquier cambio en el comportamiento puede ser un indicativo de problemas de salud subyacentes. El veterinario indagará sobre el
comportamiento del perro y ofrecerá asesoramiento en caso de problemas de conducta.
Consejos adicionales
Durante la visita anual, es recomendable hacer las siguientes consultas:
Salud reproductiva: Si el perro no está castrado/esterilizado, discutir los beneficios y posibles complicaciones de estos procedimientos.
Prevención de enfermedades comunes en la raza: Algunas razas tienen predisposiciones genéticas a ciertos problemas de salud; el veterinario puede proporcionar consejos específicos al respecto.
Realizar controles veterinarios anuales ayuda a detectar problemas de salud a tiempo y mantener a tu perro feliz y saludable. Un examen completo, la actualización de vacunas y las pruebas de laboratorio ayudan a prevenir enfermedades y a tratar cualquier condición antes de que se convierta en un problema grave. La prevención y el cuidado continuo deben ser la prioridad para cualquier dueño responsable