El Ministerio Público abrió un sumario al médico forense de Alto Paraná, Martín Alfaro, por revelar precariedad y falta de insumos para inspeccionar cadáveres.
La abogada Sandra Mayeregger de Giménez, inspectora general interina del Ministerio Público, a través de la resolución 25 del 13 de mayo pasado, dispuso la instrucción del sumario administrativo a Martín Alfaro, médico forense, informó Edgar Medina, periodista de Última Hora.
El expediente de investigación administrativa se caratula “Sumario administrativo instruido al funcionario Martín Alfaro por la supuesta comisión de faltas administrativas cometidas en el ejercicio de sus funciones”.
El médico forense fue citado y emplazado por el término de 10 días para presentar su defensa.
Fue designado el asistente fiscal Gregorio Ramón Suárez como encargado de llevar adelante el expediente de investigación administrativa.
No hay morgue estatal en Alto Paraná y no tienen tapabocas
El cuerpo de Juan Pablo, el hijo de 5 años de Carmen Ruiz Díaz, la escribana que se habría lanzado al río Monday como consecuencia de una depresión junto con sus dos niños, fue encontrado en la mañana del domingo 12 de mayo pasado y estuvo a cargo de su inspección el médico forense Alfaro.
La primera verificación se realizó en la lancha de rescate, pero como debía realizarse un trabajo más riguroso, se recurrió a la funeraria Buen Jesús, de Ciudad del Este, que prestó sin costo sus instalaciones. Además de los resultados de la inspección, Alfaro reveló las condiciones en las que hizo la inspección del cuerpo.
No hay una morgue estatal en Alto Paraná y los guantes los compró con su dinero, contó a la prensa. Además, comentó que realizaron la inspección del cuerpo del niño sin tapabocas, sin el traje que deberían utilizar y que los forenses trabajan “con una precariedad impresionante”.
Comentó que en el interior del país, las unidades de medicina forense consisten en una pequeña oficina, con apenas una computadora y una impresora.
“Lo que hacemos no es de escritorio. Nosotros necesitamos morgue, microscopio, instrumentales”, insistió.
Estima que con una inversión de alrededor de USD 500.000 se puede tener un Departamento de Medicina Forense que pueda aportar en las investigaciones fiscales.
A raíz de estas precariedades, según Alfaro, los fiscales actualmente basan sus imputaciones principalmente en declaraciones de testigos, cuando “la mitad de las pruebas deberían ser producto de la ciencia”.