Incautan vehículo presuntamente usado en el crimen del recolector en Pedro Juan Caballero. La Policía Nacional encontró este martes un automóvil que presuntamente fue utilizado en el homicidio de un recolector de latitas, ocurrido el domingo pasado en Pedro Juan Caballero, Departamento de Amambay
Agentes del Departamento de Control de Automotores y de Homicidios, en un trabajo conjunto, ubicaron este martes el automóvil de color blanco en el cual presumiblemente se movilizaban las personas que el domingo pasado asesinaron a un recolector de latitas, en Pedro Juan Caballero, Departamento de Amambay.
Se trata de un automóvil de la marca Toyota, modelo Premio, de color blanco, con chapa HFL 007, el cual figura a nombre de una persona que vive en Capiatá, Departamento Central.
El vehículo estaba abandonado en la vía pública del barrio Obrero de Pedro Juan Caballero, donde funciona un lavadero.
Hasta el momento no se descarta que sea uno de los vehículos robados diariamente en el Departamento Central.
El subcomisario Marcos Martínez, de Control de Automotores, manifestó que tuvieron conocimiento de la característica del vehículo utilizado en crimen y se empezó a realizar un trabajo conjunto con sus pares de Homicidios.
Refirió que, luego de realizar seguimiento de cámaras de circuito cerrado desde el lugar del atentado hasta donde fue abandonado, están seguros de que fue el móvil del crimen.
Mientras que el oficial Carlos Denis, de Homicidios, dijo que los disparos para cometer el asesinato posiblemente partieron del interior del rodado encontrado, del cual levantaron vainillas servidas.
Migdonio Villalba Benítez, de 46 años, fue asesinado a balazos en un camino vecinal del barrio Jardín Aurora de Pedro Juan Caballero, alrededor de las 9:30 del domingo pasado.
Según relatos de vecinos que recogió la Policía Nacional, escucharon disparos, salieron a verificar y lograron ver que un automóvil color blanco abandonaba el lugar, mientras que la víctima quedó tendida en el suelo.
Agentes de criminalística levantaron varias vainillas servidas de una pistola calibre 9 milímetros.
El detonante del crimen todavía se desconoce, pero se presume que la víctima podía estar involucrada en algún robo domiciliario, por la forma de su ejecución.