Desde que se declaró una guerra política – electoral entre el actual presidente de la Republica, Mario Abdo Benítez y el expresidente Horacio Cartes Jara, y sus respectivos seguidores, también se declaró otra guerra, la guerra de la desinformación, entre varios medios de comunicación con mayor alcance a nivel país en la que tampoco los diputados se quedaron atrás.
Al respecto, no hace falta ser un experto en la materia para darse cuenta de cuáles medios están a favor de Abdo Benítez y cuáles están a favor de Cartes Jara. Mientras los medios, digitales, impresos, radiales y televisivos pro abdistas publican noticias que afectan de forma negativa a Horacio Cartes, candidato a presidente de la Junta de Gobierno, los medios pro cartistas hacen exactamente lo mismo, publican noticias que afectan negativamente a Mario Abdo Benítez, también candidato a la presidencia de la Junta de Gobierno.
Igualmente, esta guerra entre candidatos para la presidencia de la Junta de Gobierno, Partido Colorado, tiene como principal objetivo debilitar y fortalecer dos precandidaturas a la presidencia de la República; por parte del sector abdista, debilitar la precandidatura del precandidato cartista, Santiago Peña, fortaleciendo la precandidatura del precandidato abdista, Hugo Velázquez, y por parte del sector cartista hacer lo contrario, es decir, debilitar la precandidatura del precandidato abdista, Hugo Velázquez, y fortalecer la precandidatura del precandidato cartista, Santiago Peña. Y aunque todo parezca un trabalenguas, esa es única verdad de la situación en que se encuentra el país desde el punto de vista político y pre electoral.
Lo más lamentable de todo, es que esta guerra de desinformación, más que de información, de dimes y diretes, de acusación mutua, se ha instalado en ambas cámaras de Congreso, en donde desde hace 15 días, los diputados se hallan librando una lucha circense, que para nada beneficiará a la ciudadanía, sea cual fuere el resultado final, en la que colorados abdistas y opositores, buscan por todos los medios, a cómo de lugar, destituir a la fiscal General del Estado, Sandra Quiñonez, a quien la señalan de responder a los intereses del Movimiento Honor Colorado, que lidera Horacio Cartes.
En resumidas cuentas, esta guerra entre medios de comunicación lo único que logra es confundir cada día más y más a la ciudadanía, como también dejarla, por parte de los legisladores, sin esperanzas de solución a los problemas mucho más graves que afectan al país, como ser, la gran inseguridad reinante, el narcotráfico y sus consecuencias fatales entre sus actores y efectos colaterales, la falta de trabajo y por ende el casi nulo poder adquisitivo de quienes dependen de al menos un mínimo de ingreso diario para sobrevivir, el alto índice inflacionario que genera la suba diaria de los productos de la canasta familiar, suba de pasajes, combustibles, instituciones educativas en estado deplorable y en ruinas, campesinos sin tierra y sin asistencia, tanto técnica como crediticia y muchos problemas más importantes que estar acusándose mutuamente en una Cámara, en donde cada uno de sus miembros quienes perciben como mínimo 30 millones de guaraníes por mes más otras regalías, deben legislar buscando soluciones, y no estar como comadres de barrio sacándose trapitos sucios al sol y acusándose mutuamente a ver si quién es más corrupto y más coimero, pues, al final de cuentas, al pueblo nada le importa si quién es más o menos corrupto, si quién es “perrita” o quién “mueve la cola”, si el avión es iraní o venezolano, si se compró o no se compró cigarrillos, al pueblo solo le interesa la solución a sus problemas y que justifiquen el jugoso salario y regalías que perciben para ello y no para armar tremendo circo mediático.
Fuente Radio Imperio